22 de septiembre de 2011

2a PARTE Los Alcántara en la radio. "LLEGAN LOS ACTORES"

Toca el turno de los actores, Antonio, Merche y Carlos se ponen sus cascos y se sientan en la mesa para hablarnos de estos diez años. La fuerte y elegante voz de Imanol Arias impresiona, pero también conquistaba la dulzura de Ana Duato o la naturalidad de Ricardo Gómez, quien se explicaba de maravilla e insistía en que no le llamasen Carlitos, sino Carlos, cosa con la que estoy muy de acuerdo.


A la pregunta de Monserrat sobre qué es lo normal de los Alcántara que atrae tanto, Imanol responde que a Cuéntame le ocurre lo mismo que le sucedió a series como “Hasta que la muerte nos separe” y más tarde “Old family” que miraban a la familia desde lo interno, desde la discusión, desde la bronca con el cariño. Es decir, que los Alcántara tienen una imagen y una realidad interior que hace que “el cariño que desprenden sea más tosco y más verdadero”.

EL CAMBIO EN LA MUJER Y LA VERDADERA CRISIS DE ANTONIO
fte: mil_parolas
Imanol no duda en adular a su compañera de reparto y señala que “Antonio siente que tiene una mujer que no se la merece”. Y es que Merche es mucha Merche. El progreso la invita como mujer a participar, cosa que anteriormente no podía. Ana nos cuenta que la Milano “vive entre dos generaciones” La primera es la madre de familia, niña de posguerra que viene del campo; y la segunda es la de esa mujer que pasa a tener la vida de su hija, que estudia, que se realiza como mujer profesional y empresaria. “Representa a muchos sueños y muchas ilusiones”.

Pero la crisis se mete de lleno en la vida de los Alcántara. Se escucha el audio de un Antonio incrédulo gritando: “¡¿ Cómo quiebra un banco?!”. Sin embargo, como bien explica Imanol, la gran tragedia no es la quiebra, sino que al verse sin un duro, Antonio echó de menos lo mejor que sabía hacer, lo que era verdaderamente suyo, la imprenta. Coincidí muchísimo en este punto, aún me duele esa venta. Antonio “pensó que el traje de la imprenta había cambiado su valor por haberse metido en la política, si Antonio hubiese seguido con su negocio, con su gente, no le habría pesado tanto el perder tanto dinero”.

MÁS QUE UN EQUIPO
A continuación, la atención se centraba en Ricardo Gómez y en el gran esfuerzo que ha hecho durante estos años para compaginar estudios y actuación. El joven actor considera tanto al equipo artístico como el técnico como una familia, incluso se va de vacaciones con sus padres ficticios a los que no duda en pedir consejos. Este año, Ricardo lo afronta como siempre, “con ganas”. Carlos se independiza, monta un bar con una gran similitud al “Penta” madrileño. También demostró una prodigiosa memoria acordándose de los títulos exactos de los capítulos de la serie con sólo decirle el número. Recordó que su capítulo favorito es aquel en el que Carlos quería ser musulmán y guarda como recuerdo una foto de él montado sobre los hombros de Imanol, atravesando el descampado.


...CON MANGARRIANES Y MILANOS
Este recuerdo surgió debido al juego que se le hizo a una servidora. Me llamaron para formar parte del universo Alcántara en este merecido homenaje. Qué decir…, lo viví con ilusión y emoción. Me halagó mucho el cariño, el trato de todos y las bonitas palabras de Imanol. Sólo puedo estar agradecida por el ánimo y el apoyo para continuar escribiendo. Me preguntaron qué me enganchó de la serie y lo que los nervios me permitieron decir es que me ayudó “sobre todo a entender” y a dialogar con mi familia sobre nuestro pasado más cercano. Con Cuéntame, os aseguro de corazón que se puede aprender mucho. Luego nos gastaron una divertida broma sobre una supuesta pillada de Herminia al matrimonio practicando el Kamasutra. No existe algo así, pero tanto los actores como yo pensábamos que se referían a aquella escena en la que Herminia les interrumpe viendo una película danesa. En ese momento se llegó María Galiana, que se sorprendió ante la sugerente pregunta. Muy grande María, fue recibida por todos con un gran aplauso.

MOMENTO CUÉNTAME Y EL VÉRTIGO AL ENCASILLAMIENTO
Después del divertido momento del trivial, Monserrat quiso reconocer a Ana en una de las mejores escenas de la temporada pasada y me atrevo a decir que de la historia de Cuéntame. Era aquella en la que descubría la adicción de Inés a las drogas y se encontraba la jeringuilla en su cuarto . La presentadora destacó la gran intensidad y sensibilidad de la interpretación para explicar el gran dolor que sentía Merche. Todos allí asentíamos. Ana estuvo magnifica y reconoció que se impresionó al leer el guión ya que sentía muy difícil tener que interpretar todas las escenas en las que Merche hilaba cabos y disimulaba frente a Antonio. Pero lo hizo y de aquella inmensa manera. (Post: "La droga, lo ví en aquella serie de los Alcántara) 

Con papeles así, tan bien interpretados durante tantos años, surge la cuestión del encasillamiento. A pesar de reconocer ese miedo razonable o el vértigo a verte atrapado en un mismo personaje, Ana considera que no le importa. Para Imanol, en cambio, es extraño tanto tener una continuidad larga como desaparecer durante un tiempo. “Lo raro es enganchar un papel así”decía. Ricardo ha descubierto que esta es su profesión y que quiere continuar en ella. Ve que tiene tiempo de conducir su carrera y reconoce estar entre esos dos mundos: en el que te reconozcan como Carlitos y en el que ese reconocimiento sea valioso. Por ahora no le está faltando escuela con el teatro y “El señor Ibrahim”. Pase lo que pase, una no puede más que desear que todo en el futuro les vaya bien a nuestros actores.

Continúa en:

3ª parte ESPECIAL RADIO: CUÉNTAME CÓMO SE HACE
1ª parte ESPECIAL RADIO: LA HISTORIA DE CUÉNTAME

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